Despertó y supo que aquella noche iba a ser muy larga, su medicación, los horarios, más gente a su alrededor con bata blanca y suave sonrisa a tono con el vestuario. Todo no debía ser tan ambiguo, le gustaban las cosas claritas, tan claras como el clavel de color blanco último que le regalaron.
Afuera caía la lluvia y ella jugaba con el vaho en la ventana. Pensó esto era lo que yo hacía de pequeña. También se acordó de toda la gente que no quería saber nada del pasado, a sabiendas de que si no ibas al pasado no ibas a entender el presente, mucho menos el futuro!!!
Dios, cómo me hubiese gustado retroceder cambiando tantas cosas de mi vida. Tantas cosas perjudiciales como lo eres tú. Si tú, esa persona que en la lejanía se acuerda de mi simplemente cuando hubiese faltado algo. Mejor dicho: seleccionar todo.
Me encontraba en aquellos pensamiento cuando algo me llegó, una persona desconocida quizás... Con diferentes colores en la parte de delante de su flequillo. Entonces supe que su vida no había acabado. Y que todo lo malo se podía cambiar. Pero también reparó en que no jugaban al mismo juego y en la misma partida...
Entonces un te quiero infinito, y se durmió plácidamente, hasta que la respuesta llegara a sus oídos..
Recuerdos desde mi rincón
Driadea
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