La lucha tiene nombre

     Cierto es,  que tenemos que luchar, quizás demasiado, y nos da miedo que alguien entre en nuestra vida, por el daño que nos hayan hecho o simplemente con el dolor que nosotras mismas hemos buscado.
     Veo a una mujer con una gran carga que se refleja en su vista a veces demasiado apagada. Tenemos problemas en esta vida pero yo las leo en los ojos, simplemente más divertido.
     Cristina decidió morir hace años y años, simplemente dejaría que esa maldad que la embargaba se terminaría. Hubo un tiempo que me preocupó mucho, pero las mentiras, la manipulación y el ser como está de moda decir :"persona toxica", hicieron de ella un estropicio de sirenas que ya no cantaban, cuando se apagó el infierno ella estaba allí presente, por todo el daño que había hecho en su vida, demasiado para la gente que rodeaba a Cristina, mi pluma de una fina línea la borró para siempre. Ya no vivirá más, se quedaría sola en la nada, donde se respira aún notas de una fragancia basada en la vainilla. Y así, lentamente desapareció....

espira aún notas de una fragancia basada en la vainilla. 

Saludos desde un rincón