Escuché un día por casualidad en un lugar que ayer desapareció esta historia:
"Habia una vez, una chica a la que le habían dado el grado de hada madrina, era feliz haciendo
realidad los sueños y deseos de los demas, y todas las personas que vivian a su alrededor estaban
gratamente satisfechas. Sus ojos eran oscuros, pero a ella le encantaba cambiarselos de color, y su
cabello nunca permanecia tampoco peinado igual, tambien tenia zapatos de todos los colores pero siempre los combinaba con calcetines de rayas que se
colocaba al reves, y con sus excentricidades los dias transcurrian siempre pendiente de los demas.
Todo en su mundo era alegria pues amaba y se sentía amada, pero un día caminando por la playa
se encontró a un mago que parecia esperarla, le explicó delicadamente que su trabajo no estaba
siendo el correcto y que si no cambiaba le quitarían sus poderes. El hada enmudeció ante aquel anciano,
pues no sabía que decir, penso rapidamente en todo lo que ella creia bien hecho y no logró encontrar
el fallo. El mago le habló asi: "Eres una persona de gran corazón, y por eso todo el mundo acude a ti,
pero tú no puedes cumplir todos y cada uno de los deseos de los demás pues un hada no está al
servicio de todo el mundo sin excepción, has de saber escoger a quien tienes que ayudar y a quien no.",
y sacó un gran espejo en el que le mostró cada una de las personas a las que había ayudado y que se
mofaban y aprovechaban de ella, criticando su forma de apariencia y ser, y no saciandose de pedirle
continuamente deseos.. El hada lloraba desconsoladamente pues no sabía que hacer, hasta que ella misma
revelo desde lo más hondo de su corazon la solucion: "Ya no quiero estos poderes porque si los siguiera
teniendo mi naturaleza no cambiaría y aunque se aprovecharan continuaria ayudandoles. Quiero poder hacer
realidad los sueños de las personas que realmente me quieran y yo pueda ayudar por mi misma y por lo que soy", y al decir estás palabras se sintió de nuevo liberada y en paz. El mago se fue con una sonrisa y los
poderes del hada, pero le había regalado algo que nadie podría quitarle que era la paz y la verdad.
Y se marchó de nuevo con sus ojos diferentes, sus botas moradas, y sus ganas de abrazar a los suyos.
Saludos desde mi rincón
sábado, 26 de febrero de 2011
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cariño,de lo mejor que lei ultimamente,sigue escribiendo,sigue soñando,sigue con ese corazon grande como el sol,ese sol que eres tu,mi sol
ResponderEliminarGracias peque, cuando leo palabras asi no se ni que decir. Mil besos y sueña conmigo en el mismo camino.
ResponderEliminarsoy Ángel,está muy bien,lo que mas me sorprende es que es un retrato tuyo(me incluyo en mxas cosas),has sabido transmitir como eres personalmente ,como si esa hada fueras tu, o me equivoco?
ResponderEliminarMe encanta porque te gustan mxo las hadas y lo que transmiten para ti.
No dejes de escribir y soñar,eres única
Me gusta como eres , Por que tu eres así
ResponderEliminarBonito relato .
Un abrazo y un beso .
Pablo
Soy nachooo ^^
ResponderEliminarMe ha encantado... creo que a partir de ahora te llamaré pequeña hada :P jeje... en serio me ha gustado mucho :)
Cada palabra de vuestros comentarios son
ResponderEliminarde una importancia para mi que no podeis imaginar.
OS QUIERO MUCHISIMO
;) lo mejor de lo que escribimos.. es que sale de dentro.. eso siempre hace que lo que plasman nuestras letras sea excepcional e inigualablee!!
ResponderEliminartu prima favoritaaa!! =)
Amor me a encantado.Continua asi¡¡
ResponderEliminarMe quede con ganas.
Un besazo Fuerte desde Madrid.
hola nena en verdad q esta muy lindo lo q has escrito sigue haci deberias de publicarlo es muy bueno cuidate mucho besotes
ResponderEliminarMe encantan las hadas, pero esta es tan especial que ya no se me olvida y se ha quedado con un trocito de mi rincón, espero que siga adelante siendo como es y feliz ante todo :)
ResponderEliminarAutentico y natural como tu misma,sigue no pares mi pequeña hada,que yo caminare a tu lado.
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